Dormir es una de las principales funciones del cuerpo humano, Para poder gozar de buena salud física y mental, es vital tener un sueño óptimo y reparador. Por eso que es tan necesario llevar a cabo buenas prácticas que permitan dormir mejor. Y la verdad es que no existe nada peor que no poder dormir en toda la noche. La falta de sueño y el poco descanso afecta de tal manera nuestro sistema nervioso central que no permite que tengamos el rendimiento y la energía necesaria para estar activos y con buena energía durante el día.

Tips para dormir

Por eso a continuación presentamos algunas técnicas o métodos que podemos poner en práctica para conseguir un sueño realmente placentero y reparador

1. Aplicar el método 4-7-8

Posiblemente, muchas veces hemos escuchado sobre esta técnica para dormir, pero no conocemos bien de que se trata. Este método 4-7-8, se dio a conocer por el Dr. Andrew Weil, director del Centro de Arizona para la Medicina Integrativa de la Universidad de Arizona. Él afirma que con esta técnica las personas pueden dormirse en tan solo 60 segundos. Señala que, en ese tiempo, se tranquiliza y relaja el sistema nervioso, permitiéndole al individuo minimizar los niveles de estrés de tensión corporal.

2. Practicar yoga para dormir bien

Entre los múltiples beneficios que tiene la práctica del yoga está el poder dormir bien. El yoga antes de dormir nos ayuda a liberar la tensión física y mental, nos permite relajarnos del estrés del día al punto de conseguir un sueño 100% reparador. Con el yoga liberamos serotonina, un neurotransmisor que está relacionado con la felicidad y que, además, es precursor de la melatonina, la hormona que regula los ciclos del sueño.

3. Mantener una rutina

Nuestras costumbres diarias influyen en nuestro reloj biológico y, por ende, en nuestro sueño. Para corregir esto, podemos crear un ritual antes de dormir, como puede ser tomar un baño caliente todos los días a la misma hora y tomar una infusión aromática relajante, entre otras.

4. Hacer actividad física para dormir bien

El sedentarismo, aparte de ser muy perjudicial para la salud, es un mal amigo a la hora de dormir. La práctica de una actividad física ayuda al organismo a liberar neurotransmisores como las endorfinas, que se asocian al placer, y la serotonina, que favorece la síntesis de melatonina, que regula el ciclo de sueño – vigilia.

5. Acostémonos temprano para levantarnos temprano

Este consejo también forma parte de punto 3 en mantener una rutina diaria antes de dormir. Si adquirimos el hábito de dormir temprano para levantarnos temprano, le vamos diciendo a nuestro cerebro que llegó la hora de descansar, favoreciendo el ciclo sueño – vigilia, lo que mejora nuestra calidad de vida y evitará que permanezcamos despierto hasta altas horas de la noche.

6. Evitar el alcohol

El alcohol en la actualidad es consumido con gran frecuencia en la sociedad, y aunque este tiene efecto depresor del sistema nervioso central, no es una buena opción para poder dormir bien; no obstante, el licor altera las fases del sueño posteriores, causando insomnio y malestar general durante toda la noche.

Son muchos los elementos que pueden provocarnos, no lograr dormir bien o peor, no conciliar el sueño. La presión del trabajo, los compromisos familiares y económicos e incluso las enfermedades pueden ser causantes de insomnio o falta de sueño.

Si logramos poner en práctica estos pequeños consejos, posiblemente nuestros problemas no desaparecerán, pero podremos descansar, y recuperar energías para seguir adelante con todas las responsabilidades a las que tenemos que hacer frente.