El mindful eating o alimentación consciente, aparte de nutrir nuestro organismo, tiene la finalidad de que a la hora de comer establezcamos una relación con los alimentos, donde nuestras emociones formen parte de ese vínculo. Tanto influyen nuestras emociones con los alimentos, que vemos infinidad de personas sufriendo de ansiedad y consumen sus alimentos con mayor impulso y rápidamente.

El acelerado ritmo de vida que llevamos actualmente, nos ha obligado a comer a deshoras, aceleradamente, hasta caminando, e incluso hemos llegamos al punto de ingerir la comida mientras estamos haciendo otras actividades. Es en este punto donde debemos detenemos y reflexionar sobre esos malos hábitos a la hora de comer y enfocarnos en lo que es el mindful eating o atención plena al momento de comer.

Según el Centro Lys especializado en psicología nutricional, el mindful eating se basa en “desplegar todas las sensaciones, pensamientos y emociones que sobrevienen en torno al acto de comer”. O como lo diríamos más fácilmente es tomar conciencia de qué comemos, cuánto comemos, cómo comemos y por qué comemos.

El mindful eating no tiene nada que ver dietas o recetas de comida para rebajar. Esto trata más que todo, de que tengamos conocimiento pleno y consciente en el momento que vamos a comer. Es disfrutar la comida a través de todos los sentidos y sensaciones.

Relacionarse equilibradamente con la comida

Las personas entendemos de manera errónea la relación que tenemos con la comida. Es decir, lo tenemos en nuestra mente como una necesidad fisiológica que se debe cubrir cuando tenemos o no hambre.

Atendiendo a esto último, según especialistas nutricionales, la causa principal de comer por comer de debe a la falta de atención que tenemos a las señales que nos envía nuestro organismo. En este sentido, el mindful eating o alimentación consciente nos enseña a entender a nuestro cuerpo y las señales que este nos envía equilibrando la satisfacción, el cuidado y la salud”.

¿Cómo aplicar la alimentación consciente o el mindful eating?

Lo primero que debemos tener presente con este método es lograr un alto nivel de relajación. Antes de comer, debemos respirar para que nuestra mente y cuerpo estén en un mismo nivel de relajación. Entrenamos nuestra atención plena, al momento en que iniciamos el acto de comer.

A la hora de comer, debemos hacerlo moderadamente, degustando cada porción de comida. Cantidades pequeñas, masticar bien. Al hacerlo de esta manera, estamos centrando nuestro pensamiento en los sonidos, textura, sabores, olores, colores. No debemos tener elementos distractores al momento de comer. No debemos tener elementos distractores que nos desenfoquen del acto que estamos realizando.

¿Cómo podemos empezar a entrenar la alimentación consciente?

Debemos evitar comer sin hambre. Esperemos a que el organismo nos avise. Debemos hacerle caso a las señales. Saciedad y apetito.

Comamos tranquilamente y sin apuro. Dediquemos el tiempo a nuestra comida. Saboreemos cada bocado y hagamos que el ambiente sea agradable, cómodo y acogedor.

Observemos todos los ingredientes que tiene nuestro plato.